jueves, 30 de diciembre de 2010

Mi cocina como caja de Pandora II

Le alcanzo un Atlas que tengo y el tipo me señala un lugar. "Irán, Irán", balbucea. Quizás por eso me pidió levantar una granja en mi propia cocina. (Todo lo interpreto con las señas que me hace, su idioma es muy confuso para mí, quizás sea hebreo o algo parecido). Recuerdo que en la escuela secundaria me insistían con el nacimiento de la civilización en el oriente medio y la medialuna fértil que se formaba en la zona. Eso, más el video "Do it again" de los Chemical Brothers, me hicieron recordar la importancia del ganado para sus habitantes. Entonces le ofrezco el lavadero para que tenga una cabra y, por el momento, se maneje con eso. Todavía no contestó a mi propuesta. Necesito que la acepte porque lo veo ansioso y eso me preocupa.

jueves, 23 de diciembre de 2010

Dos paradigmas, un movimiento (ensayo a revisar)

El punk tiene marcadas orientaciones. La idea entonces es tomar dos corrientes: aquella comandada por grupos que marcan una tendencia en la estética del arte, por caso los Sex Pistols, Buzzcoks o incluso Damned, más cercanos desde la imagen al dadaísmo que al rock de la época, y por otro, el irrumpimiento que encabeza The Clash. Este último en su relación con el rocksteady, con una posición más orientada a la crítica político-social. Cabe la aclaración del término "política" como significante flotante y su segmentación en dos procesos, simplemente calificatorios.

Parte I: La época del arte como reproductibilidad técnica, pero sacrilégica

Los vanguardistas inclinados a la rebelión de arte, conjuran la política con un costado revolucionario crítico hacia la jerarquización artística que, de manera taxonómica, decide pretenciosamente que se desecha y que no en términos valorativos. Contra esto, el punk arremete con el "hágalo usted mismo": no hay que saber tocar eruditamente para formar una banda, el rock es libertario y la sociedad del espectáculo que acartona los géneros sucumbe. La industria cultural es la mismísima mierda. Mc Laren se llenó los bolsillos con los Sex Pistols, pero el mensaje no era excatamente la supresión de un capitalismo acabado, sino apedrear los lineamientos pactados por aquellos sectores que se autoproclamaron meritorios de llevar la corona y el bastón de lo que las personas debían consumir. La imagen parte en mil pedazos los modelos de lo vendible, y las crestas o alfileres de gancho en el cuerpo atraviesan la nueva escena. Esto es política. El nuevo glam desde New York Dolls hasta los Mifits, es político. Me permito entonces hablar de una estética vanguardista.

Parte II: El monólogo de los Clash

En cuestión de cronologías, amerita en una segunda parte referenciar a una nueva corriente que apela a otro sentido en la circulación y recepción del punk: la crítica social y política. En los primeros "terroristas" del arte lo que se cuestinaba eran las corrientes de poder en su totalidad, sin apelar a actores sociales diferenciados. La autogestión era para todos: todos pueden hacer todo, y quienes dirigen la sociedad como un ente totalizante no comandan ninguna razón. El arte heredaba los conceptos libertarios de la anarquía. A las claras, el punk era el síntoma en términos de Zizek. Y lo seguirá siendo a principios de los 80' con The Clash: el punk es de los oprimidos, de la clase obrera inglesa, de la pobreza de los barrios más deplorables de Kingston. La contratapa del disco "The Clash" en los suburbios, la letra de "Police and thieves" y las manifestaciones de los trabajadores en Londres sirven como expresión, al igual que los ritmos de los oprimidos en "Sandinista". La política en estado puro, centralizando la protesta. Música para las masas, pero para las masas postergadas. La TV oprime, hay que salir a la calle a ganarse el lugar ("Negro o blanco a encenderlo, se enfrentan a la nueva religión. Todos sentados alrededor de la televisión. Londres se quema!") Las letras encabezan, la estética rockabilly acompaña.

Argentina: rock de protesta y decáda infame

En la Argentina, el punk va de la mano con el comienzo de los 80', la dictadura decandente y los primeros gritos de rabia en el rock. Por esos tiempos, bandas como Los Laxanates, Los Baraja o Los Violadores exploraban el submundo de lo alternativo y se enfrentaban a los intentos hegemonizantes de encasillar la música creciente y joven que empujaba los restos de lo pacato. Los Violadores compraron estética y protesta, variable artística y connotaciones políticas. El tiempo los hará tambalear y por momentos se condensarán en las corrientes de un nuevo rock argentino comercial y acartonado. Los restos que dejó esta primera oleada, más los resabios de otras tantas como Todos Tus Muertos, no llegaron a imponer un legado fuerte en la escena. Más allá de esporádicas apariciones de grupos minoritarios y cortos en el tiempo, como los hardcore o bandas punk menores, el movimiento no logró asegurarse la vanguardia de la protesta. Los 90' traerán consigo un nuevo frente encabezado por bandas como 2 Minutos: es el surgimiento del rock barrial y el canto a lo inocuo. Así, las letras se perfilan para solventar temas de amores baratos, la birra, el barrio y el fútbol. Pero no el fútbol de "Represión" ("fútbol, asado y vino son las cosas del pueblo argentino") sino el fútbol que marcha hacia el opio.

Police on my back

Finalmente, en la estirpe de lo decible, este análisis lleva a un capítulo aparte comandado por la policía como sujeto social. No existe en el denominado "nuevo punk argentino", una crítica a lo policial como parte de un aparato ideológico althusseriano. La policía aparece en el imaginario de las nuevas bandas como una institución generada para soportar el aparato estatal y ser el brazo armado que ayuda a perpetrar un método de producción opresor en términos marxistas. Ahora se trata de el policía "del barrio", "el que nos viene a sacar porque estamos la birra". "Descarten los tubos, empiezen a correr, la yuta está muy cerca..." (2 Minutos). No es el mismo policía que mató a Santillán o a Kostecki, no es el del gatillo fácil, es una analogía de Matute de Don Gato. "Está todo bien, si no me jode, yo no lo jodo": no se lo cuestiona, se lo asimila y se lo respeta como parte del mismo submundo. Y entonces el punk deja de romperse el lomo para mostrar miserias y se dedica a darle la mano a las FM que "cada tanto le pasan un temita". Son los nuevos tiempos, no sólo en la Argentina sino en el mundo que encabezan los Green Day, mano derecha de la industria cultural.
Q.E.P.D., gracias por todo. El punk ha muerto, y que viva el punk


*Apartado: el valor residual de Flema

Imposible dejar de lado a Flema, la banda del fallecido "Ricky" Espinosa, quien con sus nuevas insignias supo darle, por un instante, el lugar que el punk se merecía. Rolling Stones, el skate, la cumbia, Beethoven y el tetra-break como signos reciclables de una cultura que todo lo desecha. Entender esto es entender, como señala Stuart Hall, la simbología nazi usada por los Sex Pistols.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Boicot en clase de Lacan

En el momento que estaba leyendo algunas cositas de Debord, de la Internacional Situacionista y del Cabaret Voltaire (entre otras cosas) me encuentro con esto, que cool...!


miércoles, 15 de diciembre de 2010

Elegite uno

Y elegí "Trece maneras de mirar a un cuervo", de Fabián Casas. Casi que me emociona Casas cuando le escribe al padre o la madre...


UNO

El hombre sueña que es un hombre
y el cuevo sueña que es un cuervo
Nunca se ponen de acuerdo

DOS
En un baile, el Cuervo se reencuentra
con su primera novia.
Deciden irse a vivir juntos
Y poner una verdulería en la costa
Compran un caballo y entre sus pertenencias
cargan a la cuñada del Cuervo.
Una hermana mayor que usa vestidos
largos y floreados
y hace ruido con la boca cuando come.
El caballo se llama Corto.

TRES
Todo el día trabajando
con la cancha inclinada.
La novia, que era prostituta,
vuelve a serlo.
Si no fuera que es cierto,
esto parecería un relato de Onetti.

CUATRO
El Cuervo cae enfermo,
la novia se las toma.
La mujer que hace ruido con la boca
le confiesa que no es la hermana,
sino la madre.
El Cuervo suda por las noches
y piensa que va a morir.
La mujer lo cuida
untándole barro en la panza
y dándole té con canela.
Esto sucede en un cuartucho
de la parte de atrás de la verdulería
que ya no funciona.
El olor de las verduras y de las frutas
[fermentadas
se mezclan en los sueños del Cuervo

CINCO
Entonces, el Cuervo se recupera.

SEIS
Pasa todo un día gritando
el nombre del caballo
en un descampado
que crece detrás del negocio,
contra el bolsón de oscuridad
donde viven los que no tienen
dónde caerse muertos.

SIETE
Junta sus pertenencias
y saca un pasaje.
Vuelve al barrio
que le parece más ruidoso

OCHO
Todavía hay teléfonos grandes y ruidosos.
Grabados de dos cintas inmensas.
Trenes largos y pesados que surcan
el país. Alguien se puede sentar
en un coche comedor y escribir
mientras la máquina avanza
en la Gran Llanuera de los Chistes.
Los chicos juegan en la calle.
Los policías cuidan las esquinas.
Los Compañeros están en veremos.
Hay cines en los barrios
y nadie puede entrar a ver una película
con cinco panchos en la mano.
La cancha de su equipo del alma
está en su lugar original. Y parece inamovible.
Largas paredes de gente, con sombreros,
siguen impacientes los movimientos
supremos de Farro, Pontoni y Martino

NUEVE
En otro baile conoce a una mujer joven.
Se casan, tienen tres hijos.
Y empieza a usar sacos extravagantes.

DIEZ
A mitad de camino
muere su mujer.
El Cuervo se queda solo
y empieza a sentir una falla
en su estado de ánimo
y en el oído derecho

ONCE
El Cuervo posó
en la frente de un edificio blanco
para dolor de cabeza de los
fotógrafos que tenían que
retratarlo sin nada.
Ellos quieren al edificio
para una postal hermosa
de la ciudad de estudiantes
de Iowa City. Le tiran piedras y
le gritan, pero el Cuervo no se inmuta.
Desde arriba, los ve diminutos
Y graciosos. El Cuervo hace lo que quiere.

DOCE
Ahora salta y se sotiene en el aire.
Nunca imiten al Cuervo en sus casas.

TRECE
Tal vez por restos de la película mal digeridos
que dejó de ver cuando se durmió,
el Cuervo sueña que está desnudo
en un baño turco luchando con dos tipos
que lo quieren matar. Uno de ellos
es su hijo mayor. No lo puede creer.
Y está sangrando por las heridas
cuando se despierta y escucha el ruido
del reloj. De golpe, los 81 años sobre la tierra
pasan frente a sus ojos
como panes de azúcar
que la lluvia puede desintegrar.
En la mesita de luz está
la dentadura postiza
flotando boca abajo
en un vaso de agua.
Los lentes para leer
y las pastillas de miel que come
desde que hace mucho
dejó de fumar. En el cajón,
un paquete de viagra. Y un consolador
negro y largo como una morcilla.
En el piso, la pelela hedionda
rodeada de revistas deportivas
que estuvo leyendo en voz alta-
La pieza está oscura.
Afuera el día resplancede.
El Cuervo se endereza en la cama
Y siente un ligero picazón en la próstata
y un gusto pastoso en la boca. Y
el deseo, primero, desordenado,
anárquico de volar.

Entonces salta y se sostiene en el aire.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Mi cocina como caja de Pandora

Hace tres meses que hay un tipo atrás de mi heladera. Lo descubrí una noche de no-calor, cuando fui a satisfacer un antojo de queso rallado. Ahora, cada vez que voy a la cocina, lo saludo y él me responde con un gesto. Si estoy de humor, le convido una aceituna.

El tipo sigue ahí, acurrucado y muy nervioso...

jueves, 2 de diciembre de 2010

"Green Day no es punk"

Mientras sigo recabando y articulando información para mi tesis sobre el punk, transcribo nota de Página 12 a Pete Shelley, de Buzzcocks, antes de tocar el 26/11 en el teatro de Flores...


Por Luis Paz

Como para demostrar que el mundo ha vivido equivocado y mientras los principales mercados eran dominados por Diana Ross (Estados Unidos) y ABBA (Reino Unido), el 4 de junio de 1976, Howard Devoto y Pete Shelley debían cancelar su show en el Free Trade Hall de Manchester con los Sex Pistols porque el resto de su grupo, Buzzcocks, no apareció. A partir de entonces, la historia demuestra que Buzzcocks articuló tácitamente toda la escena de Manchester: trabajaron con Tony Wilson cuando era conocido como comunicador y no como promotor, grabaron Spiral Stratch con producción de Martin Hannett (que luego se convertiría en productor top de la movida) y dieron forma a la poética de la angustia que mistificaría a Ian Curtis, aunque con la ironía más presente. Ni Control ni 24 Hour Party People son fieles a la importancia (tal vez accidental) del grupo que Shelley llevó adelante luego de la salida de Devoto, que armaría Magazine. Dice Shelley: “Esas películas son sobre Tony, el tipo que cohesionó a la escena; e Ian, el tipo que la resume. 24 Hour Party People fue una comedia, ésa no fue la historia verdadera. Los Buzzcocks siempre estuvimos en el lado B de la historia, salvo ahora que ya la industria no deja que haya lado B: simplemente estamos fuera del lado A”.
Pete Shelley se entera de que hace un mes, en esta misma ciudad en la que tocará el 26 de noviembre, Green Day actuó frente a 35 mil personas: “Green Day no es punk; no sé si hay punk hoy. A ese nivel, seguro que no. Tocar para esa cantidad de gente no tiene que ver con el punk. El hacelo vos mismo tuvo que ver con que nadie se fijaba en vos porque el punk no era algo que pudieran convertir en una moda y porque no estábamos de acuerdo con una industria manejada por carroñeros. La industria hoy vende las sobras de un pasado que no le pertenece, como hacen con el punk. Si hasta los Jonas Brothers usan una estética que viene del punk”, tira este punk original.
Una relación angustiante con todo, un nihilismo cerrado y un sentido del humor corrosivo originado en una seria mirada sobre el entorno fueron los distintivos que hicieron de Buzzcocks una banda tan singular, junto a las guitarras galopantes, el bajo en corcheas y la batería opaca y violenta. “Siempre fui serio. El humor fue el modo que encontré para denunciar todas las estupideces que se hacen a diario”, explica. Y con ese humor también venía una obra situacionista, que buscaba generar espacios de ruptura a partir de desnudar las miserias e idioteces del modo occidental: “Fijate en Orgasm Addict, que para algunos es una canción tonta, Ever Fallen in Love pero lo que está proponiendo es el problema de sobredimensionar el sexo”, dice Shelley.
Orgasm Addict y Ever Fallen in Love (With Someone you Shoudn’t’ve), por caso, les propiciaron el mote de “banda de singles”, aun cuando han editado álbumes hilados (como sus fundamentales Another Music in a Different Kitchen, Love Bites y A Different Kind of Tension). Incluso Ever Fallen in Love fue reversionada en 2005 para un disco homenaje al legendario DJ británico John Peel por cuatros de copa como Elton John, Robert Plant, Roger Daltrey y Roger Waters. Shelley, que viene en compañía del histórico guitarrista Steve Diggle, el bajista Chris Remington y el baterista Danny Farrant, no ve mal aquello de “la banda de singles”. En última instancia, también eso es hoy una posibilidad: “El iPod ha vuelto a poner al single en foco. Es la nueva radio; pero así como en la radio había buena música y basura, en iTunes hay algunas cosas buenas y mucha mierda”.

jueves, 14 de octubre de 2010

Confesionario

El hombre me resultó agradable a la vista. Morocho, con aire melancólico pero con pinta de esos que en el baile no le escapan al éxito con las mujeres, me ofreció un cigarrillo y me hizo un comentario sobre la tarde noche. “Se viene el agua, no amigo?”. En el Parque Centenario sobrevolaba un olor inminente al aguacero que sucedería a esos minutos de charla, y que le pondría un límite de tiempo a nuestro encuentro. “Sí”, le respondí, “creo que me voy para casa”. Yo culminaba mi cita con el footing, cosa que era de mi agrado, y había parado cinco minutos para recuperar el aire de los pulmones, quienes me pedían a gritos un descanso. A pesar de todo, algo en ese personaje me atraía. Quizás era esa sinceridad que reflejaban sus ojos a cada comentario que me hacía. Pero también, creo que estaba esperando que me dijera algo más. Se notaba. Lo notaba. Sus gestos, su expresión y el permanente hablar del muchacho me decían que de un momento a otro iba a soltar lo que tenía adentro. Y lo que era adentro era, como me lo esperaba, el amor por una mujer. “¿Sabés porqué estoy acá, amigo? Porque me llamó mi ex mujer para que la venga a ver. Ella es cartonera, me dijo que iba a estar en el Parque y me vine. Lo que pasa es que se la está picoteando un gil, y quiero ver que onda”. Le pregunté si la amaba. “¿Cómo no la voy a amar? Es el amor de mi vida”. Ni bien salieron esas palabras, sus ojos engrandecieron, su mirada dejó la tristeza que esbozó al principio y todo su exterior se tiñó de excitación. Me despedí, le deseé suerte. Por casualidad había cumplido una función en la vida de ese hombre.

La lluvia comenzó, incesante.

viernes, 30 de julio de 2010

La noticia y la otra noticia

...DIJO CLARÍN...


Sorpresa en Gualeguaychú: al final, Timerman los convocó, pero a través de Twitter
Siempre por la red, el canciller acusó a los ambientalistas de suspender una reunión. Después dijo que se la habían pedido. Y luego, que el encuentro se podría hacer entre hoy y el domingo. La falta de un contacto formal molestó a los asambleístas.


...Y DIJO PÁGINA/12...


Timerman invitó a los asambleístas a una reunión
El canciller convocó formalmente a los miembros de la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú a un encuentro para explicarles los alcances del acuerdo por el control ambiental a la pastera UPM (ex Botnia) firmado el miércoles entre los presidentes Cristina Fernández de Kirchner y José Mujica.

jueves, 29 de julio de 2010

¿Que es el punk?

a-Una forma de vanguardia estética
b-Un tipo renovador de protesta social
c-Ambas
d-Ninguna de las dos
e-Nada

sábado, 10 de julio de 2010

Almagro World Cup

El barrio se inunda de la nada misma cuando la atención se centra en el football. Paisaje exacto para filmar cine apocalíptico, envidiado por el propio George Romero...


1-Potosí y Acuña de Figueroa





2-Rawson y Potosí





3-Gascón y Potosí




4-Potosí y Pasaje King

viernes, 18 de junio de 2010

Mara-Don

Hace un rato que los mundiales de fútbol no ocupan un lugar muy importante en mi atención, pero es inevitable pegarle una ojeada a Sudáfrica 2010. Y en esa volteada llegó a mis manos una nota al preparador físico la selección de Argentina, Signorini. Lejos de mis prejuicios facistas (concepto redundante) de que todos los preparadores físicos eran una mezcla de Mike Rourke en "El luchador" con los concurrentes al "gym" de Chin Fu en la novela de César Aira, aparece este personaje con afirmaciones del tipo...

"¿Por qué salen tantos talentos naturales debajo de cuatro chapas y cuatro cartones? Primero no los ayuda nadie. Y cuando trascienden todo el mundo les exige: que hablen bien, que no se coman las eses, que sean políticamente correctos, que no hablen en contra del dogma ni religioso, ni social, ni político, y sobre todo, que no hagan trastabillar el privilegio de los privilegiados del sistema."

Lejos de buscar un costado revolucionario a "la pelotita", me pareció interesante como puerta de entrada para otro tema. O dentro del mismo tema, decir que ...¡¡¡estoy podrido!!!... de la clase media resentida que usa y abusa de comentarios clasistas para denigrar a un tipo que lo único que hizo trascendente fue jugar bien a la pelota y con eso le alcanzó. Que no tuvo que levantarse a las seis de la mañana todos los días para ir a una oficina y sin embargo llegó a putearse con el Papa, abrazarse con Khadafi, Fidel Castro o Menem. O sea, hizo lo que quiso y ahora muchos hipócritas sin defectos y que nunca se contradicen lo denigran por "negro villero que no sabe hablar". Pero todo esto mirándo el mundial desde un LCD comprado en 50 cuotas.

Esto no es una defensa a Maradona, que de hecho no la necesita, es una crítica a esa masa que tendría que mandar un CV a los programas de chimentos para descargar su ira y su infelicidad de conformistas contra un tipo que hace lo que se le canta el orto como ellos quisieran y no pueden.

Mejor Messi, que no habla ni opina.

Y cualquier analogía con la historia argentina, es coincidencia.



martes, 1 de junio de 2010

Rosario Central, el descenso y la cultura popular

Las horas de sueño de los últimos días fueron limitadas. Debo admitir que hay una incertidumbre en estos momentos no relacionada con algo catastrófico, sino más bien con un vacío que se llena de imágenes pasadas. Calculo que es la misma sensación que se dice cuando uno está muriendo, se vienen a la cabeza miles de fotos nostálgicas. En mi caso, todo arrancó en cancha de Atlanta, último año de Central en Primera antes del torneo 85/86 de la vieja B Metropolitana. Esa tarde nos jugábamos unas de las últimas fichas para quedarnos en Primera, teníamos que ganar para seguir peleando y creo que fue triunfo 3-0. Digo creo porque nunca más lo volví a comprobar, me quedó en la memoria como una tarde mitológica. Tenía 6 años y apenas entraba en el mundo del uso de la razón. Usando un cliché, fue un amor a primera vista entre Rosario Central y mi alma. A partir de ahí es fácil hacer una cronología de los hechos, porque Central está en todos los días de mi vida. Es decir, uno piensa en los amigos y la familia, pero quizás no los llama para saber como andan. Con Central eso no pasa, necesito tener novedades. Siempre. Y entonces los recuerdos se asocian con eso. Si me preguntan “te acordás cuando te mudaste a Capital?”. “¡Como no acordarme, si fue el año que los dejamos afuera de la Sudamericana!” o “Te acordás de las vacaciones en Río de Janeiro?”. “Si, fue el año que agarró Miguelito Russo, en ese momento no lo quería, je”.

Central permite reconstruir mi propia historia. Y así pasaron los ochenta, donde recorrí con mi viejo todas las canchas de la B: San Miguel, El Porvenir, Banfield (ahí jugaba de local Talleres de Escalada), Morón, Platense para jugar contra Estudiantes de Buenos Aires, Defensores de Belgrano, All Boys (sí, el mismo). Y entonces ascendimos fácil, teníamos un equipazo. Y al otro año, la vuelta en Temperley en los hombros de mi primo. El 2 de mayo de 1987. Mayo. El tiempo es cíclico, y hoy mayo nos da un descenso. La vida y la muerte. Michail Bajtin hace un estudio sobre la cultura popular en la Europa Medival y cita como ejemplo un texto de Rabelais que habla del carnaval como algo paradigmático. Lugar donde el tiempo se renueva, donde no hay un fin, es la muerte y el nacimiento. Es también el lugar donde se borran las diferencias, donde todo aparece en el plano de la igualdad. Es la fiesta universal que elimina las fronteras. Y todo esto puede ser Rosario Central. El paganismo de un Dios herético y sus rituales. Es el pueblo: lo popular, lo ruidoso y quilombero. Central es el peronismo grotesco (“Rosario, maravillosa, Rosario, sensacional, Rosario, es peronista, peronista y de Central”). Es el bombo, es el Tula, es el vino y el choripan. Central no se podría llamar River Plate, Newells Old Boys o Boca Juniors porque Central no habla inglés. No sabe hablar inglés. Y no podría tener un técnico dando conferencias de prensa como Bielsa, porque el técnico de Central es el Negro Marchetta. Y un ídolo bien hablado como Martino no cuajaría en su paisaje, porque el ídolo canaya es el anti-héroe, feo, gordo, sin grandes logros deportivos: es el Puma Rodriguez. Pícaro y atorrante.

Políticamente Central es la voluntad popular rousseana. No tiene ni quiere presidentes, eso es una formalidad administrativa. Central es de 1.500.000 hinchas, no de una monarquía momentánea. Pero entonces Central se olvidó de eso, de su poder y su vigor, y se fue de copas. Se emborrachó, derrapó. Y en ese ínterin se aprovecharon de su borrachera. A mi me enseñaron que no hay que abusar de gente que no está en sus cabales, y Central no lo estaba. Pasó Escarabino, pasó el clan radical para completar la trilogía de abandono comenzada por Alfonsín y seguida por De La Rua. Y nos encontramos vacíos. Nos vaciaron. Y queremos justicia. No la justicia irracional, sino que se pague con la Ley. Pero también es la mea culpa del pueblo, de pensar siempre en el carnaval. Central tiene que ser carnaval, Central tiene que cuidar los símbolos patrios: palomitas, lanzamientos de toalla y OCAL. Pero también tiene que pensar. Y Central no piensa. Un gigante de mil cabezas que no se pudo anticipar a lo que pocos preveían: mi amigo Pablo me afirmó hace cuatro años la vuelta del gigante al ostracismo. Pero la cabeza estaba en otra cosa. Epocas "menemistas" de derroches inconscientes. La plata gastada en los Ischia, Gorosito, Wanchope y otras yerbas. Carbonari y su grupo inversor. Alfaro, el futuro “DT” campeón de Central. Los Choy Gonzalez, los Astudillo y los “Pájaro” Martinez.

Y hoy la B Nacional. Sin hinchas de visitante, sin transmisión por televisión, sin respeto a los grandes. A leer los “suple” del ascenso y mirar “El Nacional” con el ruso Ramenzzoni. A buscar técnicos y jugadores de la categoría (que firme Blas Armando, y que se venga con Bazán Vera, je). Y a transitar las canchas de Deportivo Merlo, Boca Unidos de Corrientes y Patronato de Paraná. Todo dicho.

No hay derecho, no estaba dentro de la Ley. Pero Central esquiva la lógica, evita las Leyes y se autoproclama descendido. Porque Central es un mundo, y en ese mundo todo lo rige a piaccere. Y entonces descendió porque quiso, no lo mandó la AFA, no lo mandó All Boys, se hizo el harakiri con los Jonhatan Gomez, los Yacaré Nuñez y los Galíndez. Son sus pibes de Malvinas, incapacitados para la misión que se les asignó. Ninguno estaba preparado. Por voluntad propia, Central los eligió para comandar un barco enorme. Entonces, no fluyen otras realidades más que la del destino que se forjó de manera autónoma.
Que algunos sueñen con volver rápido, que los más pesimistas crean en un inquilinato largo en la nueva división. Yo solo espero que sigamos vivos, como en estos 121 años. Ni más ni menos que antes, como siempre, canayas.

Saludos!

PD1: agradezco en todos estos años las amistades que forjé gracias a Rosario Central (Sergio, Turco, Chelo, Pablito, Seba…) y de otros tantos no-canayas que me llaman cuando saben algo de Central, se olvidan de cumpleaños o años nuevos, pero nunca de mi camiseta. Y especial mención para mi amigo Walter, que lo conocí por el fútbol, y bostero él, cada vez que nos juntamos es un encuentro de dos viejos canayas.

PD2: gracias a los que mandaron mensajes de texto y mails.

PD3: me saqué el pus de adentro, necesitaba exteriorizar. Perdón por la redacción, fue puro impulso patriótico.

PD4: y ahora, que se metan el Mundial en el orto.

martes, 2 de marzo de 2010

Y algunos días solemos hacer recomendaciones literarias...

Sintéticamente recomiendo cuentos, cuentos que subjetivamente incentivaron una neurosis ("neurosis: el término se usa para referirse a trastornos mentales que distorsionan el pensamiento racional y el funcionamiento a nivel social, familiar y laboral adecuado de las personas", según la Wikipedia de Jimmy Wales). Son los últimos tres autores argentinos que leí y, entre tantos relatos que tienen sus libros, destaco:

"Una pena extraordinaria", de Martin Kohan

"Desagravio", de Ricardo Piglia

"Ovidio"; "Una invasión-Trascendidos policiales"; "Amor y odio" de Bioy Casares

Ah, tengo aprecio por una breve historia que vale la pena por sobre otras y, si bien no entra en la categoría "autor argentino", siento ineludible releer el cuento "Tristeza" de Anton Chejov.

Nada más.

sábado, 27 de febrero de 2010

La prensa elemental

Los estudios referidos a las influencias de los mass media a partir de su irrupción en el siglo XX y la conformación de las agendas mediáticas se han aglomerado en distintas ramas y enfoques según sus efectos. Desde Katz y Lazarsfeld con su teoría de la aguja hipodérmica y la conformación de los líderes de opinión, pasando por Morley y las formas sociales de ver televisión, hasta investigaciones realizadas por científicos sociales como los trabajos de Steimberg y Traversa sobre la tapa de los diarios Clarín y La Nación, y el de Eliseo Verón en su análisis de los periódicos en Chile: todos ellos son ejemplos del papel preponderante que adquirieron los medios en el último siglo. Sin embargo, desde la aparición de la prensa escrita, hay huellas que permiten ver los antecedentes de la forma en que se presentaban las noticias ya en el siglo XIX, cuando irrumpe el papel diario para la difusión de notas. El ejemplo a tomar se da en la ficción, más prescisamente con Arthur Conan Doyle y su "Estudio en escarlta" (Londres, 1887). La situación es la difusión de una noticia sobre un asesinato que abre una investigación policial y la forma de tratar la nota la resalta el popular John H. Watson. El texto se presenta literalmente y divide la forma de informar por tres periódicos distintos:

  • El Daily Telegraph, en nota del editor, animado y popular
  • El Standard, conservador y cortés
  • El Daily News, liberal y benevolente

"El Daily Telegraph hacía notar que pocas veces se había dado en la historia del crimen una tragedia de características tan extrañas"

"El Standard comentaba el hecho de que esta clase de crímenes era cosa corriente bajo los gobiernos liberales"

"El Daily News hacía notar que no cabía la menor duda de que se trataba de un crimen político"

La observación pone en la balanza el trato y la trasposición que se le da en un recorte literario de la ficción al tratamiento de las noticias y los hechos de opinión dados en el seno de una sociedad moderna.

miércoles, 24 de febrero de 2010

Poesía de la Dinastía Chou

Un día, el emperador Yao paseaba por el campo, cuando vio a un grupo de campesinos jugando al juego del yang, y los escuchó cantar esta canción:

En cuanto el Sol sale
Comenzamos a trabajar
En cuando el Sol se pone
Comienza nuestro descanso
Cavamos un pozo
Y bebemos.
Cultivamos la tierra
Y comemos...
¿Qué tiene que ver con nosotros el poder del Emperador?

jueves, 4 de febrero de 2010

Dos femmes elegantes

En los últimos meses se están destacando dos mujeres en mi "rocola" que resaltan la voz femenina como no me pasaba desde la época dorada de Björk.
Primero me tocó con Cat Power que, saturado de que me la recomendaran, arranqué con "Jukebox" con su pila de covers jazzeros, y ahora "Moon Pix", el que más me gustó de los dos. Muy recomendable para momentos de relajación donde uno necesita paz y todo lo que tenga que ver con el "no-estres", "no-histeria", "no-merompanlaspelotas". Mucho folkie, algunas cositas muuuy chiquitas de trip-hop (en cuanto a sintetizadores) y una voz soft para redondear un disco bastante ambient.




Dezarie es una negra hermosa que tiene una voz increíble. A pesar de su tapa super africana en toda su iconografía, la flaca es de Islas Vírgenes y este es el segundo disco de dos que tiene. Acá eligió excelentes músicos y coquetea tanto con el reggae como el dub un poco más "americano" que jamaiquino. Me parece un disco buenísimo y que hace un tiempo lo tengo bastante presente al momento de cargar mi mp3.


Cuando aprenda a subir música al rapidshare, pondré los links...

martes, 2 de febrero de 2010

Caicedo y Murakami (o de como perderse en una librería de 3 x 3 por una irritable falta de desición)

Tan magnánimo es el poder de la duda en mí que no puedo irme tranquilo de una librería por el sólo hecho de que normalmente no me llevo ese libro puntual que fui a buscar? Ja! Again, again, again, siempre lo mismo. Esta última vez (última no en un sentido terminal porque se fervientemente que me va a volver a pasar) fui a buscar mi lectura para las vacaciones. Quería leer "Kafka en la orilla" de Murakami, más allá de algunas trabas mentales y prejuiciosas (de mierda) sobre el autor y su "boom" de los últimos años. Entonces vi luz y subí a la librería de Uriburu y Bartolomé Mitre, aprovechando el horario de almuerzo laboral. Iba al grano, había un sólo empleado atendiendo, un personaje con acento caribeño vendiéndole unos libros de "Elige tu propia aventura" a una chica que aclaró "son para mi novio que los colecciona". El cuadro de situación era ideal, solamente tenía que comprobar el stock. "Hola, tenés Kafka en la orilla?". A respuesta afirmativa, sacaba mi dulce tarjeta de crédito, le pagaba y me iba. Me iba! Hubiera salido feliz, triunfante y estimulado por mi nueva compra. Pero no, algo tenía que pasar. Mágicamente, al pronunciar el título del libro, apareció un muchacho -suerte de gnomo medio hippie- que con cara de bondadoso me dijo "leíste Al sur de la frontera, al oeste del sol ?". Si, si, todo muy lindo, pero no era el libro de Murakami que quería. Y la cosa se transformó en una bola de nieve. "Y de Caicedo viste algo?", me preguntó el gnomo hippie. "Angelitos empantanados" lo tenés que leer. ¿Como que no leíste a Caicedo?. Para nosotros, las nuevas generaciones, blablabla...". Y que como podía ir por la vida sin haberlo leído, y que tendría siete años de mala suerte si no le pegaba una mirada, que se me iba a caer el piano en la cabeza, y nosé que otras mierdas más me iban a pasar... Ojo, el prejucio con Caicedo también lo tuve, no lo niego, me aleja un poco ese aura kurtcobaineana del personaje suicidado. Nobleza obliga, muchos escritores tienen un karma, la pregunta es porqué pensar que todo se basa en una corriente continuista marketinera. Uno porque es sordo, el otro porque es puto, el otro que se casó con la hermana, el que se suicidó...pero éste, se suicidó para vender más?. Pobre Caicedo, los kilos de café que se podría comprar si conociera el camino de la resurrección. En fin, me fui sin mi libro pero con los textos de los demás...

"Angelitos empantanados"; "Al sur de la frontera, al oeste del sol".

Alguien me presta "Kafka en la orilla"?

viernes, 29 de enero de 2010

Críticas a la teoría informacionalista de Castells

Las teorías actuales referidas a las nuevas tecnologías y su desarrollo en la sociedad contemporánea son permanente blanco de críticas debido a su carácter novedoso y, en muchos casos, de poco sustento dado por su escasa experiencia reflejada en la vida diaria de las personas. Estas prácticas se encuentran en plena expansión y quizás la solvencia de sus argumentos deberá esperar su ratificación o refutación en el desarrollo temporal. Muchas de las miradas se dirigen a expositores como Mac Luhan y su idea de "aldea global" o Manuel Castells, cuyo concepto de "informacionalismo" presenta varias contradicciones, las cuales, a pesar de todo, no pueden opacar el aporte que hace el autor a la ciencia moderna. Teniendo en cuenta esto, tomo las críticas realizadas a la teoría informacionalista que expone Castells en dos planos: por un lado, el de las formas, por otro, el de los contenidos. Para ello, me basaré en dos textos principales: "El enredo de las redes" de Claudio Katz, y el libro de Diego de Charras, "Redes, burbujas y promesas". Comencemos con las formas. La principal objeción que se le realiza a Castells apunta al carácter totalizador y determinista de su teoría. Katz direcciona su crítica al concepto de red como “conjunto de nodos interconectados” que conformaría el poder central de la sociedad, donde cada individuo quedaría supeditado al lugar que ocupase en ella. Con esta definición, el autor asocia el concepto de nodos interconectados con un análisis social que evidenciaría la mirada de Castells a la sociedad como una red global (sociedad-red), demostrando una influencia del determinismo tecnológico. En este sentido, Katz advierte que “su enfoque le asigna de hecho a los enlaces técnicos una función determinante (…) explica a través de las redes aquellos fenómenos que el determinismo histórico –social interpreta a través de conceptos sociales como fuerzas productivas y relaciones de producción”.[1]Por su parte, Diego De Charras hace hincapié en la incidencia del informacionalismo aplicado a la conducta social, observando una íntima relación entre cultura y fuerzas productivas, relación que desembocará en nuevas formas de interacción, control y cambios sociales. De Charras apunta contra este planteo, al cual compara con la forma más mecanicista de la metáfora de base/superestrucura. El autor señala que “de la transformación operada en la base, en este caso no económica como en el marxismo ortodoxo, sino tecnológica, debemos esperar irremediablemente la transformación de la superestructura cultural y social. El riesgo mecanicista es más que evidente”[2]. En síntesis, tanto Katz como De Charras no ven con buenos ojos el desplazamiento de las relaciones sociales y humanas en detrimento de las nuevas tecnologías, las cuales solo pueden ser agentes de cambio por los intereses y objetivos que plantee el hombre.
En cuanto a la mirada apuntada a los contenidos, ambos autores hacen mención al lugar que ocupa el informasionalismo dentro del capitalismo actual. Es esta ubicación la que genera contradicciones dentro de la propia teoría de Castells, ya que el mismo no desconoce la lógica de la economía actual al advertir que “bajo el capitalismo, la separación entre los productores y los medios de producción, la mercantilización del trabajo y la propiedad privada de los medios de producción sobre la base del control del excedente comercializado (capital) determinan el principio básico de la apropiación y distribución del excedente por parte de la clase capitalista (…)”[3]. En relación a esto, señala el modo informacional como fuente de productividad pero basada en el conocimiento, conocimiento que mediaría entre fuerzas de trabajo y medios de producción. De este modo, la revolución tecnológica reemplazaría a la revolución industrial del siglo XVIII. Pero estas definiciones omiten que también el informacionalismo tiene un carácter generador de valor sin el cual no se podría desarrollar. De Charras observa esta idea, señalando que no pueden existir este tipo de progresos sin la lógica de acumulación del capital. De esta forma, Castells no logra salir de una contradicción evidente, en donde la reformulación debería apuntar o bien a un reemplazo de sistemas productivos (informacionalismo sobre el capitalismo) o bien aceptar que los nuevos desarrollos tecnológicos también entrañan las lógicas capitalistas de explotación y maximización de ganancias. Para Katz, los planteos económicos de Castells no hacen más que desviar la atención del real problema, es decir, la siempre conflictiva relación de los propietarios de los medios de producción y la libre circulación de la información y el conocimiento. Estos recursos no son bienes públicos ni gratuitos, ni están disponibles para cualquier usuario. Dichos conflictos no aparecen visibles en la teoría del informacionalismo y claro ejemplo de ello es la fragmentación que se señala en la distribución de las tecnologías, donde su separación entre “incluídos” y “excluídos” de la red no es más que la atenuación de la brecha económica dada en el contexto mundial. En este marco, las críticas realizadas por Katz y De Charras demuestran las dificultades existentes en Castells para incluir a la sociedad de la información como nuevo exponente dentro de las relaciones de producción social por sobre la lógica del capitalismo moderno.


[1] Katz, Claudio (1998), “El enredo de las redes”. En: Voces y Culturas Nº 14, Barcelona, p. 123-140.
[2] De Charras, Diego; (2006), Redes, burbujas y promesas. Prometeo, Buenos Aires.
[3] Castells, Manuel (1999). La era de la información. Vol. 1. La sociedad red. México: Siglo XXI.

miércoles, 27 de enero de 2010

Las caretas de un rey moderno

Silvio Berlusconi es uno de los personajes más analizados de la política mundial contemporánea. Sus modismos xenófobos, censores y poco civilizados recuerdan a los reyes de la Edad Media, que vivían sin reparos entre orgías gastronómicas y sexuales, con largas carreras hacia la exaltación máxima del ego. En este sentido, el caudillo italiano -que a diferencia de sus ancestros fue elegido democráticamente- es un digno heredero de estas tradiciones y no desentona con los manejos de los viejos jerarcas. Estas huellas o marcas en un sentido "veroniano" también aparecen en el campo político y sus formas de gobernar: beneficio para pocos, perjuicio y desprecio a las masas populares y minorías sociales en el sentido más abarcativo. Mientras que en la antigüedad la crueldad llegaba a la eliminación física y subyugamiento de lo distinto en términos de otredad, en la Italia actual se promueven, por ejemplo, leyes contundentes contra inmigrantes ("menos inmigrantes, menos crímenes"), todo ello bajo la mirada atenta y tibios reclamos de la Comunidad Europea. (En este sentido, no olvidar a los aliados del presidente italiano, como sucede con la “Liga del Norte” y su abierta declaración contra el Islam y sus prácticas dentro de las fronteras del país europeo). Sin hacer una abstracción temporal tan amplia, las comparaciones pueden llegar a las pampas argentinas, donde otro “líder carismático” en términos weberianos como Carlos Menem, recurría a práctica similares con las que el propio Berlusconi se podría identificar. Contactos con la mafia, fiestas con mujeres varias “muy bien pagas” y un gusto marcado por lo “privado” son puntos en común no menores entre ambos, quienes, a su vez, se vanagloriaron eternamente de sus contactos y amistades fatandulescas.

De película

En “El caimán”, película del director Nanni Moretti (confeso activista de izquierda) se retratan los manejos de un político corrupto y caótico que refleja con cinismo el absurdo de alguien que posee altos porcentajes de poder y que desde allí, con arraigo a la inmunidad que detenta desde la promulgación de leyes que impiden su juzgamiento penal, mueve varios de los hilos que rigen los destinos de los italianos. En el recorrido del film, el anonimato de este político obtendrá nombre y apellido: Silvio Berlusconi.

Populista decanta futbolero

Como buen político populista, Berlusconi tiene fuertes lazos con el fútbol. Dueño de uno de los clubes económicamente más grandes del mundo, el AC Milán, el primer ministro italiano estrechó sus lazos con las masas demostrando su simpatía por este deporte, dato no menor si se tiene en cuenta la incidencia que tiene el fútbol en un país como Italia. En este contexto, el último fin de semana se produjo el clásico de “la madolina”, encuentro que enfrenta a las dos escuadras de la ciudad norteña: Inter-Milán. Al final del partido, y con la victoria consumada del conjunto interista, el defensor Marco Materazzi (recordado por recibir un cabezazo del francés Zinedine Zidane en la final de la Copa del Mundo del año 2006) se paseó por el estadio Giusseppe Meazza con una careta del ministro. Lejos de ser esto un acto de rebeldía, el posterior llamado de Materazzi al “burlado”, demostró que se trataba de una simple broma y que tuvo “la misericordia y piedad” del supuesto damnificado, quien perdonó el gesto del futbolista.
No corrió su misma suerte Cristiano Lucarelli. El jugador del Livorno, equipo modesto de Italia, nunca ocultó su relación con el comunismo, lo que le perjudicó deportivamente en dos ocasiones: por un lado, cuando al hacer un gol en la selección italiana juvenil, mostró bajo su camiseta una remera con la imagen del "Che" Guevara, lo que lo llevó a ser proscripto para vestir la casaca azzurra. Y, posteriormente, el haber expresado abiertamente sus simpatías políticas, le frustraron el arribo a la escuadra de Milán, quien anterior a esto había fijado sus ojos en los servicios del delantero del Livorno.
En ambos casos, la influencia del "político caimán" pesó en el futuro de este jugador, influencia que rige hace años en el seno de la sociedad itálica.

jueves, 14 de enero de 2010

El oso andino y los métodos inductivo y deductivo de la investigación

En estos días el canal "Animal Planet" presentó un documental sobre los osos andinos, habitantes de la franja territorial que se extiende desde el norte "más norte" de Argentina, parte de Bolivia, Perú y Ecuador hasta Venezuela. La discusión del programa no se centraba en el análisis general del estilo de vida de estos animales sino en una supuesta dieta que, sorpresivamente, incluiría la carne. El llamado "oso con anteojos" siempre fue considerado omnívoro pero con una clara tendencia a los vegetales, con lo cual la aparición de grupos de campesinos que los acusaban de comer animales de su ganado ponía en pie la discusión sobre la verdadera preferencia a la hora de elegir un plato de comida. Con este panorama, los actores encargados de la investigación se dividían en dos grupos: por un lado, aquellos que luego de recoger a priori algunos testimonios de los pobladores partían de la teoría de que los osos andinos mutaron su dieta hasta hacerse reales carnívoros y, por el otro, quienes preferían la cautela y se abocaban al trabajo de campo referido a la búsqueda "caso por caso", herramienta que les permitiría, luego sí, una generalización sobre el tema. De esta manera, se evidenciaban dos métodos disímiles entre sí: en el primer caso, el hipotético deductivo, en el segundo, el inductivo. El curso del programa permitió también la entrada en escena de otros dos actores sociales contrapuestos: uno, el de los campesinos que a través de mostrar ejemplos de algún animal de su ganado muerto culpaban al oso y lo mostraban como un depredador para justificar su casería. El otro, un activista de una sociedad protectora que, folleto en mano, iba casa por casa intentando concientizar a los lugareños sobre las bondades del oso andino y el peligro que acarriaría su persecusión, cuyo final podría ser su extinción. Estas dos posturas no ocultaban un carácter subjetivo, ya que ambos puntos de vista tenían intereses personales en juego. Y es mediante estos testimonios que también se puede enriquecer una investigación. El problema es el traslado de una cuota importante de "lo subjetivo" dentro de los científicos intervinientes en la cuestión. Lo que se pudo observar en el desarrollo del programa es una tendencia desmedida de aquel investigador que optó por el método hipotétito de deducción, el cual partió de la teoría de que el oso andino había incoporado una gran dosis de la práctica carnívora a su dieta. Con el fin de llegar a corroborar y confirmar esta idea, el científico forzó su objeto de estudio de manera tal que con unos pocos casos de campesinos desperdigados en miles de kilómetros arribó a la generalización que buscó justificar desde un principio. Bastante más cauto que éste, el investigador que optó por el modo inductivo realizó un trabajo de campo minusioso, recorrió una buena extensión del territorio en cuestión y con grandes rasgos de objetividad se encargó de levantar la mayor cantidad de testimonios de los pobladores de la zona. El formato del programa permitió al televidente anticipar las conclusiones a las que arribarían cada uno de los investigadores: mientras que uno se perdió en la búsqueda de la satisfacción propia, contentándose con avalar su propuesta teórica, rtminó afirmando que el oso era una nueva especie de depredador, el otro pudo abstraerse del campo social y personal para apoyarse en un método científico que lo llevó a considerar que los casos analizados no permitían confirmar que la sospecha del cambio alimenticio de los osos andinos era cierta. El ejemplo de este estudio da la posibilidad de observar las dificultades que se pueden presentar al momento de adentrarse en una investigación y no poder alejar los intereses personales en relación al objeto analizado.