martes, 13 de enero de 2009

Opium for volk

En su libro "El fútbol", Eduardo Galeano hace un breve repaso del uso de este deporte por las dictaduras sudamericanas del siglo XX. El relato se origina bajo el tìtulo "Los generales y el fùtbol": "En pleno carnaval de la victoria del 70', el general Mèdici, dictador del Brasil, regalò dinero a los jugadores, posò para los fotògrafos con el trofeo en las manos y hasta cabeceò una pelota ante las càmaras. La marcha compuesta para la selecciòn, Pra frente Brasil, se convirtiò en la mùsica oficial del gobierno, mientras la imagen de Pele volando sobre la hierba ilustraba, en la televisiòn, los avisos que proclamaban: Ya nadie detiene al Brasil. Cuando Argentina ganò el Mundial del 78, el general Videla utilizò con idènticos propòsitos la imagen de Kempes imparable como un huracàn. El fùtbol es la patria, el poder es el fùtbol: Yo soy la patria, decìan las dictaduras militares. Mientras tanto, el general Pinochet, mandamàs de Chile, se hizo presidente del club Colo-Colo, el màs popular del paìs, y el general Garcia Meza, que se habìa apoderado de Bolivia, se hizo presidente del Wilstermann, un club con hinchada numerosa y fervoroza. El fùtbol es pueblo, el poder es el fùtbol: Yo soy el pueblo, decìan las dictaduras militares".
Hoy, el diario Crìtica refleja en una nota titulada "Goles son amores para Alperovich", que el gobernador de Tucumán, José Alperovich, envió a la Legislatura local un Decreto de Necesidad y Urgencia que establece una ayuda financiera de dos millones de pesos para los dos clubes más populares de la provincia. Una curiosidad: ambos clubes están gerenciados, es decir, que son más privados que públicos.
El deporte en general no deja de recabar ejemplos de su uso polìtico y la democracia nos demuestra los peores deja vù de las pràcticas totalitarias en distintos àmbitos de la cotideaneidad.

lunes, 12 de enero de 2009

ExPROpiación y mensaje en el Gobierno macrista

Hace unos cuantos dìas, el Gobierno de la Ciudad porteño anticipò una medida relacionada con el trànsito porteño que en la fecha comenzò a efectivizarse. "La idea es que el que circula sin casco y no lleva casco se le retira la moto inmediatamente. Si lleva el casco en el brazo se lo invita a ponerse el casco, si no accede, se secuestra también la moto", son palabras del ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Guillermo Montenegro. Màs allà de la discusiòn de la escencia y contenido de la medida, es interesante analizar los afiches diseminados por toda la Capital y observar las distintas formas de producir los mensajes al momento de hacer campañas relacionadas con las acciones civiles. Tomarè dos formatos que me parecieron se pueden comparar por oposiciòn: el primero, el recientemente relacionado acerca del uso del casco en los motociclistas. En el se advierte por el no uso del mismo con la consecuente pena de la sustracciòn de la moto. (Si bien en el afiche de la página del GBCA figura la leyenda "te quedas sin moto", la que aparece en las calles indica que "te sacamos la moto"). Analizando la funciòn del mensaje, en tèrminos de Jakobson se estarìa hablando de una funciòn de tipo connativa, es decir, centrado en el destinatario y con maneras imperativas. El tèrmino "usà" no sugiere ni aconseja, sino que obliga. "Si querès mantener tu moto y no correr el riesgo de perderla, usà el casco." No se somete a ningùn tipo de duda el mensaje, no se cuestiona la veracidad de la propuesta, simplemente se impone a quien conduce este tipo de vehìculo la idea de llevar siempre el casco al momento de conducir.
Pero esta no es la ùnica forma de hacer llegar un mensaje a la poblaciòn para campañas relacionadas con las cuestiones sociales. El propio GBCA lanzò en el mes de junio una campaña para la donaciòn de sangre donde se insta a la gente a realizar dicha acciòn con el consecuente beneficio para quien lo necesitara en el momento oportuno. Claramente, aquì no se maneja ningùn modo imperativo sino que se apela al sentimiento del destinatario. Es una funciòn de caràcter emotivo con la intenciòn de conmover a quien lo lee. Asì, la idea de "ayudar a cambiarle la vida a alguien" intenta "tocar" la sensibilidad de la gente, la que "con poco puede hacer mucho".
La diferencia entre ambos mensajes demuestra como este tipo de campañas pueden orientarse hacia distintos àngulos y maneras de dirigirse en la acciòn comunicacional. Siguiendo análisis de Josè Luis Fernandez, se planteaton dos caminos: el disuasivo, apuntalado a largo plazo, con ideas como el de la saturaciòn del espacio conceptual-discursivo (serìa el caso de la donaciòn), y el camino de la persuasiòn, donde se obliga un accionar (en el primer caso, claramente el uso del casco) y a partir de allì, se trata de cambiar una estructura que deberìa tener como consecuencia la modificaciòn de la conducta del grupo. Los dos casos presentados responden a cada uno de estos caminos.


lunes, 5 de enero de 2009

Relajados, leemos a Liniers...

...o por lo menos es lo que hago yo. Genera (...) y provoca (...)



Je...



Jeje...



Jejeje...




El último...creo



Ahora sí, el último...

Me parece que es un buen compiladito. Aunque tengo cierta impaciencia por dejar afuera a un montón de mis favoritos, algo más aleatorio da un toque de objetividad a la cosa. Estas tiras fueron sin orden de preferencias y obviando la cantidad inmensa de los personajes y situaciones que dan vueltas en el Mundo Macanudo de Liniers.